En el siguiente vídeo se nos muestra de forma empírica un simple método para “hipnotizar” a una pobre gallina. Por lo visto millones de años de evolución no han considerado necesario añadir nuevas “features” a los cerebros de estas curiosas aves.
Por cierto, la gallina no sufrió daño alguno durante el experimento (aunque desconocemos si tras el vídeo ayudó a dar sabor a una rico caldo).
Publicado por Unknown en 15:01
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario